Perdiendo todo
bajo el cielo gris
que me aqueja,
mis sueños son
tortuosos
y explotan en mis
ojos.
Y como un fantasma en
la noche
los recuerdos se
materializan en mi,
se convierten en agua
envenenada
que bebo hasta quedar
satisfecho.
He quedado totalmente
desamparado
ante los ojos de los
dioses vengativos,
se me está drenando
la vida aquí atrapado
entre pensamientos
que no pueden ser.
Las tardes sin nada
entre mis manos,
el vacio nuevo que va
creciendo,
las hormigas que
invaden mi casa
y la erosión de mi corazón.
Es esta la manera de
morir del solitario,
Poéticamente patética,
Arrastrándome en la
tierra,
Bebiendo lágrimas
saladas.
Es este mi tiempo de
caer de rodillas,
aceptar las gotas que
salen de mis ojos,
salir corriendo a la
vida
y abrazar las nuevas
esperanzas.
Cuervo
No hay comentarios:
Publicar un comentario